No siempre es bueno ser optimista

Esta historia comienza con Cecilia, una simple maestra de un instituto que cree en las segundas oportunidades, y Bernardo, el típico adolescente que hace bullying a quien le parezca insignificante.

Cecilia era asesora de Bernardo, y al ver que siempre había un reporte malo sobre el,  decidió que tenía que meter cartas en el asunto.

La familia de Cecilia habían sido hechiceros por más de 6 generaciones. Ella sabía encantamientos básicos y tenía su libro de hechizos, ella buscó el hechizo de "cambio de mente",  para así poder cambiar las ideas de la mente de Bernardo (aunque sin pensar en las consecuencias).

Bernardo sabía lo que quería hacer Cecilia, pero el jamás iba a cambiar de pensamiento, ya que sufre de muchos trastornos mentales. El proceso fue sencillo ya que era un simple hechizo, pero Cecilia realmente no sabía cómo funcionaba, así que cuando lo acabo se llevo una gran sorpresa...

Ellos intercambiaron de mentes, Cecilia estaba en el cuerpo de Bernardo y viceversa. 

Bernardo ya tenía un plan con respecto a esa decisión, el preparo un plan para poner a "Bernardo" en la cárcel y el poder vivir una vida en paz.

Con todo esto hecho Cecilia en el cuerpo de Bernardo fue acusado por intento de violación y usurpación de identidad. Mientras que Bernardo en el cuerpo de Cecilia disfrutaba de los privilegios de ser mujer, y más cuando hizo un hechizo de juventud.